Las bailarinas no hablan es la historia de un ideal que rápidamente se vuelve desilusión, de una institución, de una casta con mucho prestigio y pocos recursos. Y es, al mismo tiempo, la historia de una chica que crece en los '90 y los '00, que baila "un poco porque ama bailar y otro poco porque teme no hacerlo" y que, negándose al destino mudo de la danza clásica, a la restricción de expresarse únicamente con el cuerpo, aprende a narrar, se arma de coraje y, contra todo pronóstico, habla.
"Como Degas hace una representación del arte a partir de la danza, Florencia sabe que reflexionar sobre los límites de una disciplina artística corroe las bases de la institución 'arte'." Ariel Schettini - Eterna Cadencia
"La comedia de la cultura, que Werchowsky trama con maestría, conlleva un drama cultural también."
Martín Kohan - Infobae
"Es un texto escrito desde la vacilación más que desde la certeza. Y transita ese borde con un enorme sentido del humor, con la elegancia de quien camina descalza porque sabe cuánto ha costado pararse en puntas de pie." Ivana Romero - Página 12
"Así escribe Werchowsky: con precisión e inteligencia inusual, con humor y honestidad." Virginia Cosin - Revista Ñ
"Con ritmo constante y una prosa personalísima que equilibra en justa medida humor y drama, este libro es un libro para repensar los mandatos a niños prodigios, la inquebrantable voluntad de padres exigentes y la política cultural de un país en crisis constante."
Florencia Vercellone - Babilonia literaria